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Ahora, un equipo del Centro Nacional de Biotecnología (CNB-CSIC), con sede en Madrid, acaba de anunciar un resultado prometedor: un fármaco utilizado para tratar el mieloma ha logrado, en cultivo de laboratorio, frenar la multiplicación del coronavirus HCoV-229E, de la misma familia que nuestro ya familiar SARS-CoV-2.
En colaboración con la farmacéutica que descubrió dicho fármaco, los investigadores han realizado una serie de experimentos controlados en laboratorio: “hemos visto que no solo inhibe la replicación del virus, sino que además lo hace a concentraciones muy bajas y con uno de los productos que no es tóxico para las personas”, ha explicado Luis Enjuanes, codirector del laboratorio de coronavirus del CNB-CSIC, que lleva más de treinta años trabajando en esta familia de virus. “Lo importante es que este componente ya se había usado previamente en humanos, por lo que su aprobación en caso de que se confirme su efectividad frente al nuevo coronavirus podría ser muy rápida”, afirma.
Sin embargo, como recuerda el investigador, “hemos observado que el fármaco logra frenar la multiplicación de un tipo de coronavirus humano, pero no lo hemos probado aún con un coronavirus mortal para el ser humano”, y ese es el reto a pesar de los resultador tan alentadores.
Etapas en la experimentación con el nuevo fármaco
Como ya hemos dicho, aún quedan muchos pasos por dar en la investigación. El siguiente es probar el fármaco con el coronavirus SARS-CoV-1, que apareció en China en el año 2002 y causó una epidemia con síntomas graves e incluso mortales. Este virus es similar al SARS-CoV-2, causante de la actual pandemia global.
Antes de ser aplicado en seres humanos, será necesario seguir ciertos pasos. “Primero necesitamos los permisos de bioseguridad para poder evaluar la eficacia del compuesto en el laboratorio en cultivos celulares con el SARS-CoV-2. Luego se pasa a una segunda fase en la que se realizan ensayos preclínicos con animales, y se demuestra su eficacia en modelos animales, y finalmente se pasa a una tercera etapa en la que se experimenta en humanos para confirmar su eficacia antes de aplicarlo en clínica”, ha explicado Sonia Zuñiga, viróloga y codirectora del laboratorio de coronavirus del CNB-CSIC.
¿De cuánto tiempo estamos hablando? Como ya hemos comentado, la ventaja de este fármaco es que se sabe que es seguro en humanos, y de hecho las concentraciones que se han usado en los experimentos son más bajas que las que se usan habitualmente en clínica para tratar a pacientes de mieloma. “¿Cuándo podríamos saber si este fármaco es eficaz contra el nuevo coronavirus? Podría ser cuestión de dos o tres meses”, concluye Enjuanes.
Por: Victoria González
Vía: Muy Interesante.