Con la llegada del año nuevo comienza el gobierno de AMLO

Con la llegada del año nuevo comienza el gobierno de AMLO
Ya estamos en 2019 y el panorama político está lleno de esperanzas como hace mucho tiempo no se percibía. Y a pesar de que Andrés Manuel López Obrador tomó posesión el 1 de diciembre pasado, en realidad fue a partir del primer día de este año, cuando comenzó a tener el control total.

Esto sobre todo, porque ya tiene un presupuesto de egresos que marca el rumbo de los recursos que tendrá disponibles para cada proyecto que se ha planteado, que además fue muy bien recibido por los mercados financieros y en ese sentido, disminuyó significativamente la incertidumbre y regresó la confianza de los inversionistas.

A pesar de que esto a veces pareciera que no tiene nada que ver con las decisiones importantes y en este caso, de las medidas necesarias para implementar lo que el propio AMLO ha denominado la “cuarta transformación”, la estabilidad económica y financiera es fundamental para consolidar los cambios y beneficiar a todos los sectores de la sociedad.

Además, diluyó las acusaciones de querer ser un gobierno “populista” y autoritario que pondría en riesgo a la economía con tal de cumplir sus promesas de campaña y en ese sentido la llegada del 2019 marcó el arranque de la toma de decisiones importantes.

Ya es oficial la cancelación del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM), el Tren Maya comienza a perfilarse como el proyecto estrella de infraestructura y desarrollo de este sexenio y por otro parte, la estrategia para combatir el huachicoleo ya está en marcha y fue una de las decisiones más importantes del actual gobierno federal, en los pocos días que lleva operando.

Sin embargo, hay desafíos muy importantes que todavía no se ve de manera clara si será posible revertir en el corto plazo sus efectos negativos. Uno de los más urgentes es la inseguridad y la violencia, que de alguna manera no ha habido cambios importantes en los indicadores y sobre todo, en la percepción de la sociedad.

En la última semana el tema tomó relevancia luego de una publicación de Reforma, donde aseguraba que durante el primer mes del gobierno de AMLO, “los homicidios dolosos repuntaron 65 por ciento respecto al último mes de la pasada administración” y que se acumularon “887 ejecuciones”.

Ante esto, López Obrador salió al paso junto con Alfonso Durazo, el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, para aclarar este tema. En su conferencia matutina, el presidente afirmó que hay muchas imprecisiones en las cifras de Reforma, pero de manera sorprendente, informó que no son 887 homicidios, sino que en realidad el promedio es de 2 mil al mes.

“Lo que reporta el diario está por debajo de las cifras reales estimadas”, dijo López Obrador -en algo que digo que parece sorprendente-, porque es la primera vez desde que comenzó la famosa “guerra contra el crimen organizado”, que el gobierno federal desmiente una cifra que es menor a lo que en realidad sucede.

Según dijo Durazo en esa conferencia de prensa (3 de enero de 2019), “de los días que tenemos contabilizados en diciembre suman mil 786”, con lo que se duplica lo reportado por Reforma y sin embargo aseguró: “No vamos a aprovecharnos del error de un periódico”.

Esta estrategia de comunicación y de responder a la mayoría de los temas que día a día van surgiendo en la agenda nacional, ha sido uno de los principales aciertos de AMLO, ya que de primera mano afirma o desmiente información, avisa sobre las acciones que realizará su gobierno e incluso, presenta planes estratégicos como los de Pemex y el huachicol.

Con esto ha terminado en muchos sentidos con las especulaciones y repito, ha sido muy bien recibido en el plano nacional e internacional, ya que de alguna manera ataja los temas polémicos de manera inmediata y al menos a nivel mediático, le ha dado algunos puntos a favor.

Hay que esperar mucho tiempo para ver si en realidad esta propuesta de gobierno funciona, si puede debilitar de manera importante a la corrupción y si se reduce la desigualdad social, la inseguridad y otros problemas que afectan de manera directa a la sociedad, pero para bien o para mal, ya está en marcha la “cuarta transformación” de México.


Comentarios