Abrazarlo como una verdad evitaría una serie de penas inncesarias.
Gran parte del sufrimiento humano se da, a mi parecer, por dos cuestiones: La primera, la resistencia al cambio; y la segunda, la imposibilidad de salir adelante.
En esta vida tenemos como asunto seguro dos cosas también: El cambio constante y la muerte.
Bien, habiendo escrito esto, lo que sigue decir es ¿porqué no se nos ha educado en el cambio desde pequeños?, si te pones a pensar esto es simple de analizar, no sería posible o grato permanecer en los 5 años de edad toda la vida, o comer siempre lo mismo mañana, tarde y noche, siempre tener el mismo trabajo, nunca cambiar de ropa, tener una sola pareja desde tu adolescencia hasta que mueras, jamás cambiar de residencia, nunca tener la oportunidad de conocer más personas, etc., etc. ¿Sería un mundo raro no?, además… aburridísimo!!!
Entonces pareciera que nos hemos vuelto selectivos, pues algunas cosas sí nos gustan que cambien, pero las que nos implican mayor atrevimiento y esfuerzo, ésas no, simplemente se rechazan. La realidad es que la vida en el planeta no cuenta con este enfoque selectivo, sin humanos ha habido evolución y con humanos, para bien o mal, ésta se ha acrecentado mucho más. Nosotros los humanos estamos totalmente interconectados social, cultural, económicamente, que si una pieza se mueve todo lo demás recibirá su impacto, y si millones de piezas en el mundo (personas) se mueven, entonces ¿qué crees que va a pasar? Cada segundo, minuto y día habrá un sinfín de nuevos ajustes que tendrán injerencia en la vida de todos. Conclusión: Aunque no quieras las acciones de otros más temprano que tarde te alcanzarán, y quieras o no, te obligarán a cambiar.
Los cambios pueden ser a favor tuyo o parecer que van en tu contra. Claro, si tienes un ascenso en tu trabajo no te molestaría, ¿verdad?, o si te sacarás la lotería mañana, ahí sí aceptas y de muy buena gana el nuevo ajuste de vida; pero cuando percibes que el cambio te va a sacar de tu zona de confort entonces presentas la mayor de las resistencias. Así es que entre más te niegues a abrazar los nueves ajustes que se te presentan, más difícil será tu transición hacia la nueva condición.
¿Por qué siempre ha tenido una connotación tan negativa el factor de tener que vivir cambios?, será porque pareciera que vas a tener que afrontar de entrada un aparente desorden, es decir, tu “acomodada” situación actual se va a desquebrajar, dejándote a merced del caos.
A propósito, acorde a la teoría del caos, ésta nos deja ver que después del desorden viene el orden, así que considera que no tiene que ser tan caótico el navegar en el mar de asuntos que oferta el cambio; por el contrario, aunque de inicio parezca extraño, tengas emociones que te desestabilicen como el miedo, prejuicios, ansiedades, considera que afrontar tus temores pueden tener beneficios, ¡sí, leíste bien!, cuando te permites el cambio activas tu centro de capacidades y competencias más olvidadas, ¡así es!, ¿a qué me refiero?: Al pensamiento, análisis, reflexión, planeación, organización, etc. Mucho de lo que hacemos en el día a día ya va en piloto, casi automático, es decir, no demanda mucho de nosotros, pero cuando tenemos un reto enfrente, todo el cerebro se pone a trabajar para encontrar respuestas, soluciones y un nuevo sentido de orden, increíble pero cierto que ya cuando logras estabilizarte posterior a esto llega el sentido de logro y detrás de esto un reconfort a tu autoestima, esto es que tu aprecio por ti mismo se acrecenta al notar que has podido hacer frente a la situación que creías no poder manejar. Recuerda algo muy importante: Las limitantes las construyes en tu mente y tu capacidad de pensar será la mejor herramienta para salir avante ante todo cambio.
El cambio es algo muy natural, y así debería de vérsele en todo momento, como una realidad que a cada segundo se puede aproximar generada por otros, o bien, por nosotros mismos por elección consciente. Comprender que el cambio es una garantía en la vida sólo te llevará a buscar la manera de que éste siempre juegue a tu favor y no en tu contra.
Recomendación: Trabaja en una de las mejores competencias para la vida, la resilencia, la cual es la capacidad de sobreponerte a cualquier percance de la vida. Si los rosales al ser podados (un cambio) se recuperan y resurgen más bellos y fuertes, no veo porqué tu que fuiste dotado con un cerebro pensante no puedas lograr lo mismo.
Gran parte del sufrimiento humano se da, a mi parecer, por dos cuestiones: La primera, la resistencia al cambio; y la segunda, la imposibilidad de salir adelante.
En esta vida tenemos como asunto seguro dos cosas también: El cambio constante y la muerte.
Bien, habiendo escrito esto, lo que sigue decir es ¿porqué no se nos ha educado en el cambio desde pequeños?, si te pones a pensar esto es simple de analizar, no sería posible o grato permanecer en los 5 años de edad toda la vida, o comer siempre lo mismo mañana, tarde y noche, siempre tener el mismo trabajo, nunca cambiar de ropa, tener una sola pareja desde tu adolescencia hasta que mueras, jamás cambiar de residencia, nunca tener la oportunidad de conocer más personas, etc., etc. ¿Sería un mundo raro no?, además… aburridísimo!!!
Entonces pareciera que nos hemos vuelto selectivos, pues algunas cosas sí nos gustan que cambien, pero las que nos implican mayor atrevimiento y esfuerzo, ésas no, simplemente se rechazan. La realidad es que la vida en el planeta no cuenta con este enfoque selectivo, sin humanos ha habido evolución y con humanos, para bien o mal, ésta se ha acrecentado mucho más. Nosotros los humanos estamos totalmente interconectados social, cultural, económicamente, que si una pieza se mueve todo lo demás recibirá su impacto, y si millones de piezas en el mundo (personas) se mueven, entonces ¿qué crees que va a pasar? Cada segundo, minuto y día habrá un sinfín de nuevos ajustes que tendrán injerencia en la vida de todos. Conclusión: Aunque no quieras las acciones de otros más temprano que tarde te alcanzarán, y quieras o no, te obligarán a cambiar.
Los cambios pueden ser a favor tuyo o parecer que van en tu contra. Claro, si tienes un ascenso en tu trabajo no te molestaría, ¿verdad?, o si te sacarás la lotería mañana, ahí sí aceptas y de muy buena gana el nuevo ajuste de vida; pero cuando percibes que el cambio te va a sacar de tu zona de confort entonces presentas la mayor de las resistencias. Así es que entre más te niegues a abrazar los nueves ajustes que se te presentan, más difícil será tu transición hacia la nueva condición.
¿Por qué siempre ha tenido una connotación tan negativa el factor de tener que vivir cambios?, será porque pareciera que vas a tener que afrontar de entrada un aparente desorden, es decir, tu “acomodada” situación actual se va a desquebrajar, dejándote a merced del caos.
A propósito, acorde a la teoría del caos, ésta nos deja ver que después del desorden viene el orden, así que considera que no tiene que ser tan caótico el navegar en el mar de asuntos que oferta el cambio; por el contrario, aunque de inicio parezca extraño, tengas emociones que te desestabilicen como el miedo, prejuicios, ansiedades, considera que afrontar tus temores pueden tener beneficios, ¡sí, leíste bien!, cuando te permites el cambio activas tu centro de capacidades y competencias más olvidadas, ¡así es!, ¿a qué me refiero?: Al pensamiento, análisis, reflexión, planeación, organización, etc. Mucho de lo que hacemos en el día a día ya va en piloto, casi automático, es decir, no demanda mucho de nosotros, pero cuando tenemos un reto enfrente, todo el cerebro se pone a trabajar para encontrar respuestas, soluciones y un nuevo sentido de orden, increíble pero cierto que ya cuando logras estabilizarte posterior a esto llega el sentido de logro y detrás de esto un reconfort a tu autoestima, esto es que tu aprecio por ti mismo se acrecenta al notar que has podido hacer frente a la situación que creías no poder manejar. Recuerda algo muy importante: Las limitantes las construyes en tu mente y tu capacidad de pensar será la mejor herramienta para salir avante ante todo cambio.
El cambio es algo muy natural, y así debería de vérsele en todo momento, como una realidad que a cada segundo se puede aproximar generada por otros, o bien, por nosotros mismos por elección consciente. Comprender que el cambio es una garantía en la vida sólo te llevará a buscar la manera de que éste siempre juegue a tu favor y no en tu contra.
Recomendación: Trabaja en una de las mejores competencias para la vida, la resilencia, la cual es la capacidad de sobreponerte a cualquier percance de la vida. Si los rosales al ser podados (un cambio) se recuperan y resurgen más bellos y fuertes, no veo porqué tu que fuiste dotado con un cerebro pensante no puedas lograr lo mismo.
Comentarios
Publicar un comentario
Hacer un Comentario