Luego de lo ocurrido en el Colegio Rébsamen, donde perdieron la vida niños y adultos a causa de la consabida corrupción que reina en la delegación Tlalpan (no es la única, por supuesto), la jefa delegacional, Claudia Sheinbaum, se apresuró a decir que todo estaba bien.
Después, visiblemente nerviosa presentó una carpeta con quién sabe cuántos documentos para deshacerse de la culpa de no haber puesto en orden al plantel educativo durante su gestión; es decir, ya no estaba bien todo.
Luego, el jueves presentó una denuncia contra funcionarios de administraciones pasadas; es decir, estaba todo muy mal y ni ella ni sus colaboradores se dieron cuenta o quisieron hacer algo.
Luego entonces, la delegada renunció.
Sí, renunció a la vergüenza, renunció a la responsabilidad, renunció a la decencia.
Todo por una elección. Caramba, si en Morena son puros y divinos y ahora actúan como ambiciosos vulgares.
Twitter: @adejorge
Después, visiblemente nerviosa presentó una carpeta con quién sabe cuántos documentos para deshacerse de la culpa de no haber puesto en orden al plantel educativo durante su gestión; es decir, ya no estaba bien todo.
Luego, el jueves presentó una denuncia contra funcionarios de administraciones pasadas; es decir, estaba todo muy mal y ni ella ni sus colaboradores se dieron cuenta o quisieron hacer algo.
Luego entonces, la delegada renunció.
Sí, renunció a la vergüenza, renunció a la responsabilidad, renunció a la decencia.
Todo por una elección. Caramba, si en Morena son puros y divinos y ahora actúan como ambiciosos vulgares.
Twitter: @adejorge
Comentarios
Publicar un comentario
Hacer un Comentario