Resulta que el lunes, dicho medio publicó en su primera plana la noticia de que El Bronco aparecía en la portada de la revista ARegional (A.R.), misma que se publicitaba en varias vallas en la Ciudad de México.
Reforma buscó a la revista, y haciéndose pasar por gente de la oficina de "otro gobernador", interesado en publicitarse de la misma forma, obtuvo información de que la portada de la revista se vende en 400 mil pesos, adicional al costo de los anuncios y espectaculares que se requieran.
En el caso de El Bronco, fuentes de la revista señalaron que además de pagar la portada, había pagado un "precio especial" de 7 millones de pesos por los espectaculares adquiridos.
No es ninguna novedad que los políticos utilicen las portadas de las revistas, o el lanzamiento de un libro, para aprovechar y publicitarse en diversos medios, buscando darles la vuelta a las leyes electorales.
Hemos visto el caso del ex gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle, quien hace unos meses aparecía en la portada de la revista de sociales Central, y tapizaba la Ciudad de México con anuncios. Otro caso a comienzos de su administración, fue el del Gobernador de Chiapas, Manuel Velasco, quien fue duramente criticado por promocionar su informe de gobierno en las calles de la capital del país. También apareció en la portada de la revista Quién, anunciando su romance con quien hoy es su esposa, la cantante Anahí. Otro que salió en esa misma revista bajo el título "El Soltero de Oro" fue el Jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera. Asimismo, Margarita Zavala presentó su libro y con ese pretexto se publicitó en diversos espectaculares en el país.
Todos han pasado por el escrutinio y la crítica pública al hacer este tipo de artimañas para lograr posicionarse entre la gente y apoyar sus aspiraciones políticas. Sin embargo, no se había registrado un pleito público por una situación así, hasta el día ayer.
Resulta que El Bronco expulsó al reportero de el Reforma, y criticó la nota publicada. Negó que haya pagado 7.4 millones de pesos para publicitarse en espectaculares en la Ciudad de México. Pero tampoco señaló quién lo había hecho, siendo que una fuente de la propia revista había revelado lo contrario.
En mi opinión, el gobernador perdió los estribos y mostró su lado más vulnerable que tiene un político, que es la amenaza del uso del poder en contra de un particular. En su crítica, Jaime Rodríguez amenazó al reportero “yo no te cuestionaré a ti, como el dueño de tu periódico se robó una calle en San Pedro, o cómo anda en helicóptero todos los días, ¿De dónde saca el dinero para comprar el helicóptero?, ¿Quién le paga el helicóptero?, ¿Qué negocios tiene?, ¿Recursos privados, de dónde?, pues lo vamos a fiscalizar para ver si es cierto si son privados, igual los recursos. Y si no son, recursos malos o mal habidos. ¿Por qué no confían en nosotros, y nosotros tenemos que confiar en ustedes?
El periódico tiene un derecho y una libertad de expresión, cierto, pero no puede mentir, y ha mentido muchas veces. Entonces aquí yo te preguntaría, a ver si lo publicas, que aclare cómo le dieron una calle en San Pedro para ampliar su casa, que ampare cuántas casas tiene en Allende, ¿Cómo tiene un yate no sé dónde, helicóptero?, ¿Qué empresario tiene helicópteros y aviones?, ¿Nada más de vender el periódico?”
En lo personal, la mayoría de los empresarios que conozco que tienen un medio de comunicación, como un periódico, tienen un helicóptero, por lo menos. También conozco a varios empresarios que tienen un yate, y no por eso su dinero es mal habido.
¿Cuál es el fin de El Bronco de amenazar a un reportero de que van a fiscalizar los recursos del periódico donde labora, para ver si son lícitos?. De igual forma, si él tiene información de que la familia Junco de la Vega, propietaria del periódico Reforma, fueron beneficiados para ampliar su casa, ¿Por qué no denuncia el hecho?
Más aún, para El Bronco todo aquel que tiene un helicóptero y un yate, entonces, ¿Su dinero es mal habido? ¿Eso es lo que podría esperarse de él si llegara a la Presidencia de la República?, ¿Utilizar el aparato del estado para amedrentar a los medios de comunicación u a otros empresarios que lo cuestionan? Creo que El Bronco se le fueron los estribos, y emulando al Presidente Trump, en su lucha contra los medios, la regó.
Finalmente, el gobernador de Nuevo León perdió el enfoque de la propia nota que le publicaron, y olvidó responder una sola pregunta: ¿Quién pagó la publicidad de las vallas de la revista?, porque me queda claro que esa publicidad tuvo un costo que alguien absorbió. Los dueños de los espectaculares no precisamente se distinguen por ser hermanitos de la caridad. Si los empleados de la revista ya aceptaron que El Bronco pagó por dicha publicidad, entonces ¿Para qué negarlo?, ¿Para qué emprender una lucha contra un medio, la libertad de expresión, llegar hasta la fiscalización y la amenaza? ¿No hubiera sido más fácil salir a decir que la propia revista absorbió el costo y comprobarlo? Veremos el desenlace de esta nueva trama de El Bronco contra los medios, veremos si le funciona.
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