La podredumbre de la Policía Federal

La podredumbre de la Policía Federal
Acusaciones por tortura y uso excesivo de la fuerza contra la Policía Federal, además de los diversos informes incompletos elaborados por sus elementos, hicieron que Miguel Ángel Osorio Chong, titular de la Secretaria de Gobernación (Segob) destituyera a Enrique Galindo y nombrará como nuevo delegado de la corporación a Manelich Castilla Craviotto.

El Comisario General, Maestro. Manelich Castilla Craviotto, nacido en Mérida, Yucatán; con 17 años de formación policial en el extranjero y en México, fue el titular de la División Gendarmería y en cuanto asumió el cargo este martes, comenzó con los ajustes en sus fuerzas interiores de la corporación ya que sus elementos, también tienen acusaciones contra sus mandos superiores, diferencias que no pretende le disminuyan su misión y objetivo de otorgar al estado mexicano, una mayor seguridad; por eso mismo, uno de sus primeros ajustes fue fusionar la división de Seguridad Regional con la Gendarmería, por lo que a partir de este miércoles la nueva Gendarmería, tomará el control de los aeropuertos del país.

El poder que el Secretario de Gobernación y el cargo le confieren a Manelich, permitieron que de manera inmediata legitimará su ascenso con la destitución del general Salvador Camacho Aguirre, con quien tuvo dos altercados muy marcados, el primero de ellos en los Cabos y otro más en una reunión de seguridad efectuada en la ciudad México; pero la justificación es que la división de fuerzas federales, concentraba el mayor número de denuncias y detenidos por secuestro y extorsión, por lo que en las próximas horas se confirmara al nuevo Jefe de Fuerzas Federales, que a decir verdad, procederá de la División de Seguridad Regional, es decir de la Escuela de la Policía Federal de Caminos.

Castilla Craviotto, conoce perfectamente las injusticias al interior de la PF, incluso sabe perfectamente de los abusos contra los elementos, la destitución indebida de mandos de agrupamientos, inspectores generales y demás conflictos que tienen un desorden en el corazón de la corporación federal que ha sido fuertemente criticada hasta por ejecuciones extrajudiciales, por lo que su primera misión deberá poner orden y acabar con los abusos dentro y fuera de la Policía Federal.

Al nuevo comisionado Manelich Castilla, como a sus entonces elementos de la Gendarmería, les toco mendingar recursos municipales y estatales para poder conseguir hospedajes, alimentos, llantas, gasolina y demás recursos para subsistir fuera del cuartel general, mientras patrullaban las entidades a donde fueron destinados; a Manelich y su gente, los que no eran los consentidos de la PF, también les toco sufrir la burocracia de la corporación para obtener nuevos uniformes y equipo táctico para defender los sectores primarios de la nación.

Hoy Castilla Craviotto, está arriba y no debe pisar ningún dedo, porque el día que le toque bajar, los que van de subida o la misma vida lo podría pisotear.

davidcastellanost@hotmail.com
 

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