Banco de Chipre confirma pérdidas para grandes depositantes

bancos de Chipre
El Economista.
Grandes depositantes en los mayores bancos de Chipre perderán alrededor de un 60 por ciento de sus ahorros sobre 100.000 euros, confirmó el sábado su banco central, lo que agudizó los términos de un rescate que ha remecido a los bancos europeos y ha salvado a la isla de la bancarrota.

Las señales iniciales de que grandes depositantes en el Banco de Chipre sufrirían pérdidas por un 30 por ciento o un 40 por ciento -la primera vez que la zona euro ha hecho que clientes de bancos contribuyan a un rescate- ya había preocupado a inversores en bancos europeos esta semana.

Pero el decreto oficial publicado el sábado confirmó un informe de Reuters del día anterior respecto a que el banco entregaría a los depositantes acciones por un valor de sólo un 37,5 por ciento de sus ahorros superiores a 100.000 euros. El resto de dichas tenencias podría no ser pagado nunca.

El endurecimiento de los términos enviará una señal clara de que el rescate significa el fin de Chipre como un centro de finanzas en el exterior y podría acelerar el declive económico de la isla y provocar mayores pérdidas de puestos de trabajo.

Los bancos reabrieron ante una calma relativa el jueves tras permanecer cerrados por casi dos semanas y luego de imponer controles de capital. Las calles de Nicosia estaban en calma el sábado, llenas de multitudes relajándose en cafés y bares.

Por ahora no hay señales de que los clientes corrientes en otros países atribulados de la zona euro, como Grecia, Italia o España, estén asustados por el precedente establecido por el rescate.

  • "Chipre es y seguirá siendo un caso especial", dijo el ministro de Finanzas alemán, Wolfgang Schaeuble -uno de los arquitectos de la respuesta de la zona euro a una crisis de deuda que se encuentra ahora en su cuarto año- al periódico germano Bild.

"Las cuentas de ahorro en Europa están a salvo", agregó.

Funcionarios europeos han trabajado duro esta semana para remarcar que el rescate de la isla fue un caso único, luego de que la declaración del presidente del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem, de que el rescate serviría como modelo para futuras crisis remeció a los mercados financieros europeos.

"Juntos en el Eurogrupo decidimos que los dueños y acreedores participaran de los costos del rescate, en otras palabras, aquellos que ayudaron a causar la crisis", dijo Schaeuble.

"La economía de Chipre pasará ahora por un período largo y doloroso de ajuste. Pero entonces pagará de vuelta el préstamo cuando esté sobre cimientos económicos sólidos", añadió.

Convocatoria a manifestación


El presidente de Chipre, Nicos Anastasiades, dijo el viernes que el rescate por 10.000 millones de euros (13.000 millones de dólares) contuvo el riesgo de una bancarrota nacional y que impediría que el país abandone al euro.

Sin embargo, los chipriotas están molestos por el precio que conlleva el rescate: la reducción del segundo mayor banco de la isla, El Banco Popular de Chipre, también conocido como Laiki, y una penalización sin precedentes de depósitos superiores a los 100.000 euros.

Etyk, un sindicato de trabajadores bancarios, convocó a una manifestación fuera del Parlamento para el jueves para protestar contra posibles recortes de empleo y pérdidas en sus fondos de pensiones.

Bajo los términos del decreto del sábado, los activos del banco Laiki serán transferidos al Banco de Chipre. Ahí, alrededor de un 22,5 por ciento de los depósitos superiores a 100.000 euros no atraerán intereses. El 40 por ciento remanente seguirá recaudando intereses, pero estos no serán pagados a menos que al banco tenga un buen desempeño.

Quienes tengan cuentas menores a 100.000 euros seguirán estando protegidos bajo la garantía estatal a los depósitos.

La imposición de los controles de capital ha llevado a los economistas a advertir que podría surgir un "euro chipriota" de segunda clase, en que los fondos atrapados en la isla serían menos valiosos que los euros que pueden ser gastados libremente afuera.

Entre otras cosas, los chipriotas y los extranjeros tienen autorizado a llevar sólo hasta 1.000 euros en efectivo al abandonar la isla.

Anastasiades dijo que las restricciones -sin precedentes en el bloque monetario común desde que el euro y las notas bancarias entraron en circulación en el 2002- serán levantadas en forma gradual.

Sin embargo, no entregó un calendario, pero el banco central afirmó que las medidas serán revisadas a diario.
El Economista.

Comentarios