Choque de trenes

La Sana Distancia | Jorge Diaz

La turbulencia apenas comienza. Todos los partidos y sus equipos tienen sus barajas arriba, el juego de ninguna manera será abierto. A toda acción, la feroz reacción, me pegas te pego, te llevas te aguantas. Había quienes pronosticaban una campaña aterciopelada, un tono más suave, con el argumento de que la ciudadanía ya estaba cansada de tanta polarización, me da la impresión que se equivocan, en la búsqueda del poder no hay consideración y menos cuando se trata de los que serán gobernados.

Ahí tienen que en menos de cuarenta y ocho horas los periódicos registraron detalles que pueden explotar poniendo las circunstancias de más de uno de los candidatos en situación comprometida.

Primero tenemos el asunto de las grabaciones filtradas a los medios donde se escucha hablar a Vázquez Mota con uno de los de su equipo. Casi todos (como es explicable) se fueron con la parte en la que la candidata recrimina a García Luna y a Alejandra Sota de estarlos grabando. Y pues le salió cierto, efectivamente esa conversación fue grabada y hasta ahora filtrada (momento más que oportuno para quien quiera hacerle daño a su candidatura).

De ser cierta la versión de Vázquez Mota, todo parece indicar que duerme con el enemigo, pues ante el hecho de que todos conozcamos esas grabaciones ahora, explicaría que quizá García Luna y/o Alejandra Sota le estarán dejando un recuerdito por haberse ido de boca. De ser así, acaso el gobierno federal no está muy interesado en apoyar incondicionalmente su candidatura, puesto que no hizo nada para detener las filtraciones que tienen un tinte de carácter personal.

Para mi lo más grave de lo que pudimos escuchar en dichas grabaciones, fue la pregunta de Josefina a su colaborador: “Mi Agus vamos a ganar y luego qué vamos a hacer”. ¿De ese tamaño son las dudas de la que pretende llevar las riendas del país? ¿No sabe qué va a hacer? Quien aspira a ser líder de cualquier cosa, se prepara con mucha anticipación, estudia, sueña, planea, hace compromisos, se rodea de expertos y no lo deja todo a la suerte. Después de esto, no cabe duda, hoy más que nunca los mexicanos debemos reflexionar seriamente nuestra participación en las elecciones.

En el mismo periodo de tiempo, se anunció que la mamá de la niña Paulette, Lizette Farah, ha demandado a Enrique Peña Nieto y al gobierno del Estado de México. Es inocente pensar que la demandante actúa por sí sola y únicamente por el motivo de buscar la reparación del supuesto daño provocado a su persona, el golpe que se le quiere propinar al priista es electoral y hay más de uno detrás de esto. Revivir el caso más polémico de los últimos tiempos para tratar de tirar la imagen del puntero en las encuestas era una estrategia esperada y ya llegó. El desenlace es de pronóstico reservado.

Por su parte, el PRI revira exigiendo una investigación seria sobre la caída de los helicópteros donde perdieron la vida los Secretarios de Gobernación, Francisco Blake Mora, Juan Camilo Mouriño y Ramón Martín Huerta y otros tantos donde al menos noventa y cinco personas fallecieron. ¿Así o más fuerte? La suspicacia del mexicano lo llevó a especular mucho sobre esos accidentes y amplios sectores de la opinión pública no quedaron conformes con las explicaciones oficiales. El PRI lo sabe y si le quiere poner un freno a las embestidas de Calderón en su obsesión de no regresarles el poder, poner el dedo en el asunto de esos accidentes, calará profundo.

¿Choque de trenes? Ahí viene y mejor hágase a un lado, no le vaya a tocar.

  

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