Los candidatos y su twitter

La Sana Distancia | Jorge Diaz

Por obvias razones, un servidor se tiene que recetar a diario lo expresado desde las cuentas en distintas redes sociales de los protagonistas en esta elección, dependencias y personajes infumables (y otros no tanto) de la esfera política nacional. Concentrándome en esta ocasión sólo en twitter (dado que según estadísticas es la red social más politizada), doy mis impresiones personales que se derivan de la cotidianeidad, intermitencia en el uso de la herramienta de micro blogging y que no responden a ningún estudio concienzudo sobre el uso que los candidatos han dado a sus cuentas personales (o no tanto).

Enrique Peña Nieto es probablemente quien más actividad presenta en su cuenta. No obstante; sus mensajes son de carácter declaratorio, fija posturas y opiniones sobre un particular u otro, también informa sobre actividades y ofrece algunas fotografías. Prácticamente no interactúa con sus seguidores y no propone el debate de algún tema polémico que lo acerque a los usuarios. Sería deseable que, con tacto, intentara polemizar y hasta enfrentar uno que otro usuario enardecido para mostrarse como una persona de carne y hueso. Entiendo que el momento político es delicado, pero creo que empezar a proponer y porque no, sorprender con un lado más humano que se preocupe y tome en cuenta el sentir de los ciudadanos a través de esta red y no sólo de concentraciones multitudinarias concertadas, le podría traer dividendos. Bien plantado, ni un call center completo podría con los interesados en estar cerca del puntero en las encuestas.

La cuenta de Josefina Vázquez Mota en twitter es como la reencarnación del “Tío Gamboín”. Se concreta a enviar saludos, abrazos y “follow Friday” a sus cuates y cuentas que la apoyan “incondicionalmente”. En esta cuenta no encontramos declaraciones o posturas, sólo afirmaciones que rayan en las burdas técnicas de venta de las transnacionales. Creo que en el intento de presentar un personaje cercano, lo único que consiguen es un “bot” manda-saludos. Además, su fotografía de vendedora de bienes raíces choca tanto que dan ganas de bloquearla. Pero no lo voy a hacer, no te preocupes Pina. No hay substancia.

El caso del tabasqueño López Obrador es quizá el más tímido. Sólo informa y punto. “Estuvimos acá o allá” o “La gente me dijo o se quejó” y ya. Tomando en cuenta la gran voluntad de participar que tienen los simpatizantes del candidato de las izquierdas en esta red, AMLO está desaprovechando el medio para enviar mensajes y proponer polémicas que por la “viralidad” que sus seguidores le darían, podría enganchar a unos cuantos para que se interesaran en su mensaje y le dieran lo que ha venido solicitando: el beneficio de la duda. No hay que tenerle tanto miedo a los “trolles”, hay mucha gente de carne y hueso dispuesta a seguir las conversaciones.

El que hizo gala de la máxima: “El fin justifica los medios” fue el candidato por el PANAL, Quadri, que “retuiteando” un tweet bastante vulgar, provocó que en pocas horas mucha gente supiera de quién se trataba y cual era su nueva chamba. Me pregunto si lo anterior fue espontaneo o premeditado, porque el efecto conseguido no lo hubieran logrado ni veinte mil spots. Sin embargo, creo que hasta ahí llegará, a menos que durante la campaña y siguiendo la línea vulgar que nos regaló poco antes de su debut, se anime a publicar fotos en su “time line” de chicas bien tratadas por la naturaleza o por el cirujano, porque por el lado político se ve difícil.

No sé si sea ignorancia, desprecio o miedo, pero a estas alturas yo esperaba más de los candidatos en cuanto a su participación en esta red.


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