De la Democracia a la anarquía y al regreso del PRI

Si bien no se pueden negar avances y beneficios con la llegada de la democracia a México a finales de los noventa y el inicio del dos mil, tampoco se puede negar que entre los partidos políticos encargados de canalizar las demandas sociales y fomentar la cultura democrática progresista, cívica y  de mejora continua, el nuevo régimen sólo sirvió para desencadenar los más mezquinos intereses y la egoísta sed de algunos actores para hacerse del poder y por qué no decirlo, de los negocios.

A partir de la salida del poder del partido hegemónico PRI, se lanzaron sobre el país dejado a la suerte de herramientas democráticas poco conocidas y utilizadas, organizaciones sindicales, líderes políticos de diversos niveles e ideologías, la institución presidencial, miembros prominentes de la iniciativa privada, etc.

La impresión que dan es: después que el depredador se alimentó de su presa hasta la saciedad, llegan los carroñeros a devorar los restos.

Es común ver lo que antes era monopolio priista en materia electoral, ser práctica común de los otros partidos que impulsaron el giro hacia la democracia: compra de votos, acarreos, robo de urnas, violencia e intimidación en las casillas electorales y la eterna negociación con la miseria de un pueblo que entre tortas y refrescos hace lo que le pidas. Se convirtieron en copias tricolores, mientras el PRI preparaba su regreso.

Los recientes acontecimientos en algunos municipios de Puebla, donde se tuvieron que suspender los comicios electorales porque los ayuntamientos se vieron rebasados por las “organizaciones políticas”, lo confirma. Aquello fue vergonzoso.

Poco más de diez años de democracia y pocas ganancias para el país, sólo algunos se han beneficiado de forma ruin. La incapacidad para llegar a acuerdos, pero sobre todo la ausencia de una auténtica preocupación por la patria, acerca cada vez más a un PRI que da la impresión que ha vuelto a sentir hambre.

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Comentarios

  1. Vaya! que buen comentario! Pocos se atreven a decirlo y lo peor..es que también pocos nos atrevemos a aceptarlo y generar algún cambio. Todo lo dejamos pasar.

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  2. El problema real de nosotros como mexicanos es que solo buscamos nuestro beneficio, tratar de hacer quedar mal al competidor ya sea en lo laboral, deporte y sobre todo en la política. recordemos que cuando el PRI era gobierno el PAN le bloqueaba las iniciativas y después paso lo contrario, en muchos de esos casos el PRD se ha manejado a su conveniencia y no la del país. Ojala algún día los que nos dirigen política y económicamente que lo que importa es MÉXICO. debemos de dejar de ser el pais de los cangrejos ya es hora de que esa solidaridad que decimos tener se la demos a nuestro pais para ser un pais de primer mundo.

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