La renuncia de Pascual

“La verdad no mata pero incomoda”


Si bien para muchos la renuncia del ahora ex embajador norteamericano en México puede ser observado como una presión directa del presidente Calderón sobre la Casa Blanca para que esto ocurriera, probablemente fue una consecuencia indirecta por la negativa de Obama a retirarlo de su cargo cuando nuestro primer mandatario lo solicitó.

Hay que aceptar que efectivamente el Presidente se salió con la suya y ya  no lo verá más en estas tierras, pero esto pudo haber sido derivado de la ley del hielo que le impusieron todas las dependencias y sus titulares y no por la atronadora denuncia que pudo haber hecho Calderón frente a Obama.

Al verse prácticamente inhabilitado y desacreditado para llevar a cabo sus funciones, el gobierno norteamericano no tuvo otra más que prescindir de él. ¿De qué sirve un embajador si nadie lo considera para nada? Triste no ha de estar Pascual, después de todo, chamba la tiene segura como confirmaron las autoridades estadounidenses cuando anunciaron que regresará con un cargo en Washington.

A estas alturas, es cómico el proceder del gobierno gringo que en su arrogancia no acepta que lo removió del puesto y hacen la pantomima de decirse sorprendidos por la renuncia. Es práctica común en muchas empresas y hasta equipos de futbol darle algo de dignidad a sus empleados cediéndoles la versión de que se van y nunca aceptar que fueron corridos.

También son cómicos los motivos por los que el Gobierno Federal se ofendió. Para ser honestos, lo que Pascual dijo en sus informes y que posteriormente fueron ventilados en Wikileaks, no son novedad para nadie.

De hecho, en ningún momento se vieron reacciones de indignación por parte de los mexicanos al enterarse de lo que Pascual comentaba a sus jefes; por el contrario, fue más iracunda la respuesta de los nacionales por los casos de Florence Cassez y las bromas ñoñas de los ñoños de “Top Gear”, por lo que este capítulo se lo anota únicamente Felipe Calderón por su intolerancia a escuchar verdades.

Por lo pronto, los norteamericanos no tardarán en nombrar al sucesor del embajador incomodo, sea quien sea vendrá a hacer lo mismo, sólo que ahora cuidará sobremanera que nadie, ni Wikileaks, lo balconee.     

Comentarios

  1. Esta forma de quitarse a periodicasos "las moscas" que molestan a las autoridades en cualquier nivel es más común de lo que pensamos; es cierto Felipe Calderón es intolerante para escuchar verdades. Y seguramente el que se presume su asesor espiritual le aconsejo "te molesta o te causa incomodidad,CORRELO" porque en las áreas donde se mueven así actúan. Lo peor es que piensan que nadie se da cuenta... creen que son invisibles? o simplemente llega un momento en que nada les importa, salirse con la suya y enfermamente obtener sus caprichos.

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  2. @SoonPerez22/3/11 13:01

    Pues si, es sólo una lavadita de cara, para seguir haciendo lo mismo.

    No importa quién esté, el plan de EE.UU. sigue siendo el mismo. El infiltrarse en las lineas de desarrollo estrategico de Mexico, como energia, comunicacion, educacion, milicia, etc.

    El plan es que seamos un vil apéndice de servicios secundarios, en donde solo unos cuantos privilegiados nacionales, serán la "cara morena" que dirigira el saqueo y eliminacion de la soberania.

    Muchos saludos!

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