Si usted todavía no lo sabe, lo voy a poner a temblar. El secretario de Hacienda Ernesto Cordero, declaró que descarta el riesgo de un alza generalizada de precios.
Pues ¡aguas que ahí viene el tren!
Y es que parece una maldición, cuando un político sale a declarar algo que desde su perspectiva es una buena noticia, automáticamente el destino se encarga de desmentirlo y ponerlo en la peor de las evidencias.
Los acontecimientos más recientes, me dan la razón:
Ahí tiene que a principios de año el Presidente Felipe Calderón presumía de los avances en su lucha contra el crimen organizado y al siguiente día le acomodaron una larga lista de descabezados frente a un centro comercial en Acapulco.
Enrique Peña Nieto dice que los índices de violencia en Edomex no son para alarmarse y al poco tiempo le ponen sus muertitos.
Ebrard critica a los Estados que gobierna el PRI por la violencia que en estos impera y comienzan los actos de violencia en DF.
Las dirigencias nacionales del PAN y PRD, alegremente amenazaban con la alianza para competir por la gubernatura del Estado de México y AMLO se las tumba.
¿Recuerda el lector a Carlos Salinas de Gortari? Él siempre dijo que durante su sexenio todo fue genial y todavía estamos pagando la voltereta que el destino le dio a sus palabras. Por eso se lo digo, no por otra cosa.
Usted se acordará de más ejemplos pues la lista es interminable. Cuando un político anda presumiendo, de inmediato se manifiesta el karma y se las voltea. Lo peor del caso es que quien la lleva, somos los mexicanos. Por lo que no estaría de más pedirles que aprendan a callarse cuando quieran presumir o dar una “buena noticia”.
Así es que prepárese, porque si Cordero dijo que no va a haber aumentos… SI VA A HABER AUMENTOS.
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