A propósito del lema de campaña del entonces candidato a la presidencia de la república por el PAN en 2006 Felipe Calderón, que rezaba “El Presidente del Empleo” habría que reflexionar no solo si esta meta se está alcanzando, hay opiniones muy dispares al respecto, sino también en el cómo se ha mejorado la calidad con la que las empresas mexicanas y extranjeras en nuestro territorio y las agencias “especializadas” llevan a cabo el proceso de contratación. Es común observar en las principales páginas de los periódicos impresos y en los sitios especializados online, que los requisitos que algunas empresas anteponen a los candidatos son claramente discriminatorios. Y no pasa nada!
Admito que no se puede generalizar, pero mientras exista una sola empresa en el País que discrimine en sus procesos de contratación tiene que ser denunciado.
Vemos requisitos tales como:
- Sin sobrepeso
- Apuesto
- Exclusivamente mujeres
- Exclusivamente hombres
- Menor de 30 años
- Exclusivamente egresados de escuelas privadas
- Guapa
La lista sería aun más larga y posiblemente Usted tenga ejemplos aún más patéticos. Es entendible que la experiencia y el giro en los estudios sean indispensables para cubrir cierto perfil, pero el ser obeso no debería ser un obstáculo para cubrir una vacante en una tienda de modas, ser hombre no es obstáculo para vender cosméticos, ser mujer no es impedimento para vender medicamentos para la disfunción eréctil…
Si lo anterior es ofensivo, imagínense a todos aquellos que solicitan un empleo y abiertamente expresan o evidencian preferencias sexuales distintas a las convencionales, deben vivir un horror.
En otras sociedades sería de escándalo que esto fuera público, aclaro que esto no quiere decir que no ocurra en otros países, sin embargo el descaro y cinismo con el que impunemente ocurre en México es ridículo y definitivamente debería ser penado. Hay lugares donde existe y se aplica una legislación estricta a través de órganos de gobierno que monitorean, establecen procedimientos, vigilan su cumplimiento y sancionan al infractor.
Es muy difícil regular el criterio de la persona que decide contratar o no a un candidato, finalmente es algo muy íntimo, pero hay candados que se pueden establecer para reducir al máximo esta clase de abusos. Podríamos empezar por las formas en las que se redacta una vacante.
El asunto es simple y se rige por la ley de la oferta y la demanda, la oferta de empleos en el país cada vez es mas reducida y la demanda aumenta, entonces toda la ventaja está del lado de la oferta de empleos, con tanta demanda ante la escasa oferta pueden pedir hasta a la hermana del postulante como concubina a cambio de un sueldo miserable y no es con leyes contra la discriminación como esto cambiaría.
ResponderBorrarLo que se requiere es de leyes que quiebren los monopolios y desaten una verdadera competencia, entonces sí las empresas tendrían que pelear por el mejor recurso humano.
Pero mientras tengamos aberraciones como Televisa que detenta mas del 70% de las concesiones en su área por poner un ejemplo no interesa que reforme las leyes contra la discriminación, siempre les podrán dar la vuelta.